Billones de cigarras que han pasado entre 13 y 17 años bajo tierra están emergiendo ahora en partes del medio oeste y del sur de Estados Unidos.
“Los estados del sur y el centro de Estados Unidos serán los más afectados”, adelanta Paula Shrewsbury, entomóloga de la Universidad de Maryland. «Tendrán billones de cigarras».
Las cigarras de 13 años, Brood XIX, se encuentran en Georgia, Tennessee, las Carolinas y otras partes del sureste. La generación XIII; las de 17 años, surgió principalmente en Illinois. Las cigarras periódicas, que permanecen bajo tierra durante años y luego emergen juntas, sólo se encuentran en Estados Unidos.
«Ese es uno de los grandes misterios de por qué estas cigarras evolucionaron con ciclos de vida realmente largos, entre los más extensos entre todos los insectos», dice Floyd Shockley, entomólogo del Museo Nacional de Historia Natural del Smithsonian, y añadiendo que podría ser una radical reacción a los cambios de temperatura hace mucho tiempo.
«Las últimas edades de hielo, que habrían ocurrido después de que Magicicada evolucionara, pueden haberlos obligado a tener ciclos de vida más largos para sobrevivir períodos de tiempo en los que los árboles que les sirven de cobija habrían sido impactados por los glaciares», agrega Shockley.
Las cigarras pasan sus años bajo tierra como ninfas alimentándose de la savia de los árboles hasta que llega el momento de ascender, lo que ocurre cuando la temperatura del suelo alcanza unos 17 grados centígrados [64 grados Fahrenheit].
Llega el momento de aparearse
«Esa primera noche, su único objetivo es convertirse en adulto», dice Shockley. “Les lleva varias horas completar este proceso. Por lo general, comienzan al anochecer y lo hacen la mayor parte por la noche para evitar a los depredadores. No es una estrategia muy efectiva, pero cuando sales por millones o cientos de millones, realmente no tienes que preocuparte demasiado por sobrevivir… todavía hay muchas [cigarras] para la fase reproductiva”.
Al cabo de unos días comienza la danza de apareamiento. Los machos de las cigarras se reúnen en los árboles y comienzan a cantar para atraer a las hembras, quienes les harán señales si están interesadas.
Ocurre así: “Ella moverá sus alas y él se apareará con ella. Y una vez que la cigarra se aparea, él inserta lo que se llama un tapón copulador, que tapa a la hembra para que otros machos no puedan aparearse con ella”, dice Shrewsbury. «Pero luego podrá buscar otras hembras con las que aparearse».
El apareamiento puede durar desde unas pocas horas hasta un día. Una vez apareadas, las hembras comienzan a crear hendiduras en los tallos de las ramas de los árboles donde pondrán de 400 a 600 huevos antes de morir.
¿Tiempo de morir o de vivir?
Todas las cigarras vivirán en la superficie sólo de cuatro a seis semanas, el tiempo suficiente para aparearse y poner huevos antes de una muerte masiva de adultos. Los huevos que quedan eclosionan entre seis y ocho semanas después. Las ninfas nacidas caen al suelo y se esconden bajo la tierra para comenzar el ciclo de nuevo.
Si bien las cigarras pueden ser una molestia para algunos, los científicos dicen que tienen beneficios ecológicos y no dañan a las personas ni a los animales. Por ejemplo, los millones de pieles que se desprenden se descomponen y esta materia orgánica se recicla nuevamente en el suelo.
“Y cuando salen del suelo, excavan estos agujeros, y esos agujeros agregarán agujeros de aireamiento para las raíces de las plantas. Y la infiltración de agua será mejor, por lo que ayudará a que las plantas crezcan mejor”, exlica Shrewsbury.
Los insectos también son una fuente de alimento nutritivo para los animales.
«Vemos mucha alimentación, especialmente de aves, pero también de mamíferos y reptiles que aprovechan esa abundante fuente alimenticia», dice Shockley. “Dondequiera que surjan las cigarras, hay un aumento poblacional de esos depredadores. Y así harán una muy buena temporada. Y luego, por supuesto, sus poblaciones se reducirán de forma natural cuando esa abundante fuente de alimento desaparezca”.
Pero, las cigarras también pueden ser una fuente de alimento para los humanos. Hay recetas para todo, desde cigarras salteadas hasta tacos de cigarras y cigarras bañadas en chocolate. Tanto Shrewsbury como Shockley los han probado.
«Las cigarras tienen un sabor a nuez, pero son muy nutritivas», dice. «Los insectos en general son muy nutritivos», asevera Shrewsbury.
«La mayoría de la gente prefiere seguir adelante y quitarles las alas y las patas», dice Shockley. “Solo porque, no sé por qué, piensan que tal vez sea un poco menos espeluznante. Pero son deliciosas”.
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