El presidente Joe Biden se pronunció nuevamente contra la Segunda Enmienda y pidió este martes prohibir la fabricación y la venta al público de armas de asalto.
Estados Unidos ya prohibió la venta de armas de asalto en 1994, pero la ley estaba diseñada para expirar en 10 años y en 2004 no fue renovada.
Este lunes, senadores demócratas propusieron un proyecto de ley para volver a adoptar la prohibición de las armas de asalto, y otro para aumentar la edad mínima para poder comprar estas armas a 21 años.
"Animo a ambas cámaras del Congreso a actuar con rapidez y mandar esta prohibición de los rifles de asalto a mi mesa", aseguró Biden.
El año pasado, tras los tiroteos de Uvalde (Texas) y Búfalo (Nueva York), los legisladores estadounidenses aprobaron un paquete de medidas para limitar el acceso a las armas de fuego, aunque quedaron lejos del objetivo progresista de prohibir las armas de asalto.
Al mismo tiempo, sin embargo, la Corte Suprema blindó el derecho de los estadounidenses a llevar armas en público al invalidar una ley de Nueva York que prohibía portar armas de fuego en la calle sin un permiso especial.