El alcalde Eric Adams convirtió este viernes en ley un proyecto que prohíbe discriminar a cualquier persona por su estatura o peso en el empleo, vivienda o lugares públicos en la ciudad de Nueva York.
“Nadie debería ser discriminado por su altura y peso. Todos merecemos el mismo acceso al empleo, la vivienda y los lugares públicos, independientemente de nuestra apariencia”, dijo el alcalde Adams tras la firma de la ley, promovida por el concejal de origen dominicano Shawn Abreu.
Agregó que la ley ayudará a crear lugares de trabajo y entornos de vida más inclusivos, sin importar qué tan alto sea o cuánto pese cuando está buscando trabajo o está tratando de alquilar un apartamento.
El concejal Abreu destacó que la discriminación por tamaño corporal es un problema de "justicia social" y una amenaza para la salud pública. "A las personas con diferentes tipos de cuerpos se les niega el acceso a oportunidades laborales y salarios iguales, y no han tenido ningún recurso legal para impugnarlo. Peor aún, a millones se les enseña a odiar sus cuerpos", afirmó el demócrata, sin mencionar como la obesidad puede afectar la salud de las personas.
La nueva ley contempla sin embargo alguna excepción en los casos en que las leyes o reglamentos federales, estatales o locales recojan recojan la necesidad de llevar a cabo ciertos esfuerzos físicos (bomberos o empleados de recogida de basura, por ejemplo).