La Asociación Nacional estadounidense del Rifle (NRA) anunció este jueves que demanda a la Administración de Joe Biden en un intento por acabar con la nueva normativa federal sobre pistolas con estabilizadores, que el presidente había calificado de "especialmente peligrosas".
El organismo apuntó en Twitter que ese reglamento "supone un claro abuso de poder" por parte de la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF) y demuestra que está "claramente" aplicando la agenda "contra las armas de fuego" del mandatario demócrata.
La normativa en cuestión, que entró en vigor el pasado 31 de enero, obliga a los dueños y compañías que vendan soportes estabilizadores a someterse a una serie de controles, como el registro del accesorio y el arma y el pago de un impuesto por su posesión.
"La nueva definición de la ATF para esos soportes estabilizadores es arbitraria... Todos los propietarios estadounidenses de armas corren el riesgo de afrontar cargos por delitos graves por el capricho de estos burócratas", apuntó el director ejecutivo de la NRA, Jason Ouimet.
La demanda fue interpuesta en Dakota del Norte y la NRA dice estar respaldada por los fabricantes de armas y estabilizadores SB Tactical y B&T USA y una coalición de 25 estados encabezada por los fiscales generales de Virginia Occidental, Patrick Morrisey, y de Dakota del Norte, Drew Wrigley.