El camero abrió el camino de la victoria del Barça en su partido 48 contra el conjunto blaugrana
Los pitos de la afición culé cada vez que entró en contacto con el balón se convirtieron en euforia con su tanto
En la previa del encuentro, Sergio Ramos expresó su deseo de marcar en el que era su regreso al feudo blaugrana. Pues sus deseos se vieron cumplidos, pero no como él esperaba y hubiera querido. El de Camas marcó, pero fue para abrir el triunfo del Barça, en propia puerta. El primero en sus 48 duelos contra el Barça.
El conjunto blaugrana es el equipo al que más veces se ha medido a lo largo de su extensa carrera deportiva. En estos 48 enfrentamientos había anotado cinco goles, el último, en su última visita al Camp Nou, el 24 de octubre del 202, un encuentro en el que el Real Madrid se acabó imponiendo por 1-3 con un piscinazo incluído del andaluz que decantó la balanza para el conjunto blanco.
Ayer la afición del Barça le recibió como se recibe a todos los futbolistas que han vestido en alguna ocasión la zamarra del Real Madrid. Y más en el caso de un jugador que pasó 16 temporadas en Chamartín, siendo uno de los buques insignia de aquel Real Madrid e José Mourinho con el que el ‘Pep Team’ sostuvo batallas muy cruentas.
Los pitos resonaron cuando su nombre sonó por megafonía y cada vez que entró en contacto con el balón…. hasta esa acción en el minuto 75, en el que hizo elevar al marcador el primer gol del Barça.
La acción la inició Ferran Torres con un centro que Lamine Yamale bajó con la cabeza. Y Ramos introdujo el cuero en su propia portería en su intento de despejar. El primer gol en propia puerta ante el Barça en 48 partidos. Cosas del destino.
