Las delegaciones del gobierno colombiano y del Estado Mayor Central, una disidencia de la extinta guerrilla Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), instalarán formalmente el 8 de octubre las negociaciones de paz y comenzarán un cese del fuego que duraría, en principio, 10 meses.
El jefe de la delegación del gobierno, Camilo González Posso, informó el martes el comienzo del alto el fuego «bilateral, temporal, de carácter nacional y territorial” con esa organización, luego de tres días de reuniones entre ambas partes en el departamento del Cauca, en el sureste colombiano.
El Estado Mayor Central es un grupo disidente que no se acogió al acuerdo de paz entre el Estado colombiano y las FARC firmado en noviembre de 2016 y que tiene presencia en el sureste y noroeste del país y en la frontera con Venezuela.
“No se había presentado un cese del fuego de estas características ni esta duración en la historia de los diálogos por la paz en Colombia”, afirmó el delegado del gobierno.
Carlos Eduardo García, conocido con el alias de Andrey Avendaño y jefe de la delegación del grupo ilegal, informó a su vez que la organización liberará a tres soldados del ejército colombiano que mantiene retenidos desde hace varios meses.
De acuerdo con Avendaño, “vamos a hacer los preparativos que sean necesarios y vamos también a invitar a las entidades que se encargarían de acompañar esta liberación para que pronto estos militares se puedan encontrar con sus familias”.
De igual forma, el jefe de la delegación del Estado Mayor Central anunció que esa organización no atentará contra las elecciones regionales que se realizarán el próximo 29 de octubre e invitó a los ciudadanos a salir a votar “de forma tranquila”.
Según las autoridades, la disidencia de las FARC tendría alrededor de 4.000 integrantes comandados por Néstor Gregorio Vera Fernández, conocido con el alias de Iván Mordisco.
