El Estadio do Dragao rugió cada vez que el jugador blaugrana tocó el balón; los silbidos fueron constantes
El internacional portugués pasó por las categorías inferiores del club portuense, pero luego se marchó al Benfica
Tal y como se esperaba, la afición del Oporto no brindó un buen recibimiento al blaugrana Joao Félix. El Estadio do Dragao rugió cada vez que le llegó el balón. Pese a que el mediapunta portugués pasó por las categorías inferiores del club portuense, la afición local le pitó sin parar y no le perdonó su pasado benfiquista.
Joao Félix fue uno de los principales alicientes del partido ante el Oporto. La afición de los dragones le esperaba con ganas y no tardó en demostrarlo. La animadversión nació en su primera y única visita el Estadio do Dragao con la camiseta del Benfica. Aquel 2 de marzo de 2019 marcó el primero de los dos goles del equipo lisboeta (1-2) y no se cortó a la hora de celebrarlo. No sentó bien a la afición de los dragones.
Joao Félix había pasado por la cantera del Oporto. Estuvo alló de 2008 a 2014, aunque ante la falta de oportunidades opó por cambiar de aires y tras un año en el Padroense se acabó incorporando al juvenil del Benfica. En el club de las ‘águilas’ fue el trampolín que andaba buscando.